Análisis de las últimas modificaciones legislativas y su impacto en los procesos de divorcio
El panorama del derecho de familia en España ha experimentado cambios significativos en los últimos años, especialmente en lo que respecta a la custodia compartida. Lo que antes era considerado una excepción en los procesos de divorcio y separación, ahora se ha convertido en el modelo preferente para garantizar el interés superior del menor. Este cambio de paradigma refleja una evolución social y jurídica que reconoce la importancia de mantener vínculos sólidos con ambos progenitores tras la ruptura de la pareja.
La custodia compartida no es simplemente una división matemática del tiempo que el menor pasa con cada progenitor. Se trata de un modelo integral que busca garantizar la corresponsabilidad parental y el desarrollo equilibrado del menor, manteniendo vínculos afectivos estables con ambos padres. Este enfoque ha demostrado beneficios tanto para los hijos como para los progenitores, reduciendo conflictos y favoreciendo una adaptación más saludable a la nueva situación familiar.
En este contexto, es fundamental comprender cómo los cambios normativos recientes han transformado la práctica judicial y qué implicaciones tienen para las familias que atraviesan procesos de separación o divorcio.
Marco legal actual de la custodia compartida
Evolución normativa
La custodia compartida en España tiene su base legal en el artículo 92 del Código Civil, que ha sido objeto de múltiples modificaciones desde su introducción. La custodia compartida no tuvo un reconocimiento legal expreso hasta la Ley 15/2005, de 8 de julio, modificativa del Código Civil y de la Ley de Enjuiciamiento Civil en materia de separación y divorcio.
La normativa establece que «el Juez, cuando adopte sus resoluciones sobre la guarda y custodia de los hijos, velará por el cumplimiento de su derecho a ser oídos». Esta disposición refleja el principio fundamental del favor filii (favor del hijo), que debe presidir todas las decisiones relacionadas con los menores.
Modificaciones recientes
Tras la actualización publicada el 06/09/2022, que entró en vigor el 26/09/2022, se modifica el apartado 7 por la disposición final 1.1 de la Ley 16/2022, de 5 de septiembre. Esta reforma ha clarificado aspectos importantes del régimen de custodia compartida, especialmente en relación con los requisitos para su adopción.
El artículo 92 establece los siguientes principios fundamentales:
- Interés superior del menor: Todas las decisiones deben orientarse al bienestar del menor
- Derecho de audiencia: Los menores deben ser escuchados en función de su edad y madurez
- Corresponsabilidad parental: Ambos progenitores mantienen sus responsabilidades y derechos
- Flexibilidad: El régimen debe adaptarse a las circunstancias específicas de cada familia
Cambios jurisprudenciales significativos
Doctrina del Tribunal Supremo
La jurisprudencia del Tribunal Supremo ha experimentado una evolución notable en los últimos años. La STS 488/2024 ratificó que, salvo circunstancias adversas, la custodia compartida debe ser la norma general en España. Esta sentencia marca un hito importante al establecer que la custodia compartida no debe ser considerada una medida excepcional, sino el régimen preferente.
Los criterios que establece la jurisprudencia actual para la adopción de la custodia compartida incluyen:
Criterios positivos:
- Disponibilidad de ambos progenitores: Capacidad real para atender las necesidades del menor
- Proximidad geográfica: Que permita mantener la estabilidad educativa y social del menor
- Relación afectiva normalizada: Vínculos sanos entre el menor y ambos progenitores
- Comunicación fluida: Capacidad de coordinación entre los progenitores
Criterios negativos:
- Conflictividad extrema: Que pueda perjudicar al menor
- Falta de disponibilidad: Imposibilidad real de uno de los progenitores para asumir la custodia
- Problemas de adaptación: Dificultades del menor para adaptarse al régimen compartido
- Circunstancias especiales: Situaciones que desaconsejen este régimen
Evolución hacia la preferencia legal
El cambio más significativo radica en el enfoque judicial. Mientras que anteriormente la custodia compartida requería una justificación especial, ahora es la custodia exclusiva la que debe ser especialmente motivada. Los tribunales deben explicar detalladamente por qué no es viable la custodia compartida cuando optan por la custodia exclusiva.
Esta evolución se basa en estudios psicosociales que demuestran los beneficios de mantener vínculos sólidos con ambos progenitores, siempre que no existan circunstancias que lo desaconsejen.
Impacto en los procesos de divorcio
Cambios en la práctica judicial
La preferencia legal por la custodia compartida ha transformado la práctica judicial de varias maneras:
Mayor protagonismo de los equipos psicosociales: Los informes de trabajo social y psicológicos han adquirido mayor relevancia para evaluar la viabilidad de la custodia compartida.
Emphasis en la mediación: Los tribunales promueven activamente la mediación familiar como herramienta para alcanzar acuerdos consensuados.
Análisis más exhaustivo: Se requiere un estudio pormenorizado de las circunstancias familiares antes de descartar la custodia compartida.
Efectos en las pensiones de alimentos
La custodia compartida también impacta en el régimen económico post-divorcio:
Reducción de pensiones: Cuando se establece custodia compartida, las pensiones de alimentos suelen reducirse o incluso eliminarse, ya que ambos progenitores asumen directamente los gastos del menor.
Gastos extraordinarios: Se mantiene la obligación de contribuir a gastos extraordinarios, que suelen repartirse proporcionalmente según los ingresos de cada progenitor.
Flexibilidad económica: Se permite mayor flexibilidad en los acuerdos económicos, adaptándose a las circunstancias específicas de cada familia.
Requisitos para la custodia compartida
Requisitos básicos
Para que se pueda establecer un régimen de custodia compartida, deben concurrir ciertos requisitos fundamentales:
Capacidad parental adecuada: Ambos progenitores deben tener la capacidad física, emocional y económica para atender las necesidades del menor.
Estabilidad del menor: El régimen debe garantizar la estabilidad educativa, social y emocional del menor.
Coordinación entre progenitores: Debe existir un mínimo de comunicación y coordinación para tomar decisiones conjuntas sobre el menor.
Proximidad geográfica: La distancia entre los domicilios debe permitir el desarrollo normal de la vida del menor.
Evaluación judicial
Los tribunales evalúan múltiples factores antes de establecer la custodia compartida:
Informe del Ministerio Fiscal: Supedita al informe favorable del Ministerio Fiscal la adopción de un régimen de guarda y custodia compartida de los hijos menores de edad cuando no hay acuerdo entre los progenitores.
Audiencia del menor: Los menores con suficiente madurez son escuchados para conocer sus preferencias y sentimientos.
Informes técnicos: Se valoran informes psicosociales, escolares y médicos que aporten información relevante sobre la situación del menor.
Análisis de la situación familiar: Se estudian las circunstancias específicas de cada familia, incluyendo horarios laborales, disponibilidad y recursos de cada progenitor.
Beneficios de la custodia compartida
Para los menores
La investigación internacional ha demostrado múltiples beneficios de la custodia compartida para los menores:
Estabilidad emocional: Mantener vínculos sólidos con ambos progenitores favorece el desarrollo emocional equilibrado.
Menor conflictividad: Los menores experimentan menos tensión cuando ambos padres mantienen roles activos en su crianza.
Mejor adaptación: La custodia compartida facilita la adaptación a la nueva situación familiar.
Desarrollo integral: Los menores se benefician de las diferentes aportaciones y perspectivas de ambos progenitores.
Para los progenitores
Los beneficios también se extienden a los progenitores:
Corresponsabilidad real: Ambos mantienen un papel activo en la crianza y educación de los hijos.
Reducción de conflictos: La custodia compartida tiende a reducir las disputas post-divorcio.
Equilibrio personal: Permite a ambos progenitores mantener su vida personal y profesional.
Satisfacción parental: Mayor satisfacción al mantener una relación significativa con los hijos.
Desafíos y consideraciones especiales
Situaciones que pueden desaconsejar la custodia compartida
Aunque la custodia compartida es el régimen preferente, existen situaciones que pueden desaconsejarla:
Violencia doméstica: Antecedentes de violencia física o psicológica hacia el menor o el otro progenitor.
Problemas de salud mental: Trastornos mentales graves que impidan el ejercicio adecuado de la función parental.
Adicciones: Problemas de alcoholismo o drogadicción no tratados.
Conflictividad extrema: Cuando el nivel de conflicto entre los progenitores es tan alto que perjudica gravemente al menor.
Distancia geográfica: Cuando la distancia entre domicilios hace inviable la custodia compartida.
Aspectos prácticos a considerar
Coordinación logística: La custodia compartida requiere una coordinación constante entre los progenitores para aspectos como horarios, actividades extraescolares y citas médicas.
Flexibilidad: Es necesario mantener flexibilidad para adaptarse a las necesidades cambiantes del menor.
Comunicación efectiva: Los progenitores deben desarrollar habilidades de comunicación para tomar decisiones conjuntas.
Estabilidad de rutinas: Mantener rutinas similares en ambos hogares favorece la adaptación del menor.
Procedimiento para solicitar custodia compartida
Vías de establecimiento
La custodia compartida puede establecerse por diferentes vías:
Acuerdo mutuo: Cuando ambos progenitores están de acuerdo, el proceso es más sencillo y rápido.
Solicitud unilateral: Un progenitor puede solicitar custodia compartida aunque el otro se oponga.
Modificación de medidas: Se puede solicitar el cambio de custodia exclusiva a compartida cuando cambien las circunstancias.
Documentación necesaria
Para solicitar custodia compartida se requiere:
- Propuesta de régimen: Detalle del reparto de tiempos y responsabilidades
- Información sobre viviendas: Características de ambos domicilios
- Situación laboral: Horarios y disponibilidad de cada progenitor
- Recursos económicos: Capacidad económica para atender al menor
- Informes médicos: Si existen circunstancias de salud relevantes
Custodia compartida en las comunidades autónomas
Legislación autonómica
Algunas comunidades autónomas han desarrollado legislación específica sobre custodia compartida:
País Vasco: La Ley 7/2015, de 30 de junio, regula la custodia compartida como régimen más adecuado en los casos de separación o divorcio, atendiendo a los requisitos establecidos en su articulado y siempre velando por el interés superior de los y las menores.
Cataluña: Ha desarrollado normativa específica que favorece la custodia compartida como régimen preferente.
Aragón: Cuenta con legislación propia que establece criterios específicos para la custodia compartida.
Valencia: Ha impulsado reformas para favorecer la corresponsabilidad parental.
Armonización legislativa
Existe un debate sobre la necesidad de armonizar la legislación autonómica con la estatal para evitar disparidades territoriales en el tratamiento de la custodia compartida.
Perspectivas de futuro
Tendencias legislativas
Varios partidos políticos han propuesto reformas legislativas que garanticen la custodia compartida como norma general, estableciendo la custodia exclusiva solo en casos excepcionales. Estas propuestas buscan:
- Codificar la preferencia: Establecer legalmente la custodia compartida como régimen preferente
- Criterios objetivos: Definir criterios claros para la adopción de cada régimen
- Procedimientos específicos: Desarrollar procedimientos adaptados a la custodia compartida
Desafíos pendientes
Formación judicial: Necesidad de formar a jueces y fiscales en los nuevos paradigmas de custodia compartida.
Recursos técnicos: Ampliar los equipos psicosociales para atender la creciente demanda de informes técnicos.
Mediación familiar: Potenciar la mediación como herramienta para alcanzar acuerdos consensuados.
Seguimiento post-sentencia: Desarrollar mecanismos de seguimiento para evaluar el funcionamiento de los regímenes de custodia compartida.
Aspectos económicos y custodia compartida
Impacto en las pensiones
Una novedad importante es que, en caso de separaciones o divorcios con custodia compartida, el título de familia numerosa lo podrán ostentar ambos progenitores, para que ambos puedan acogerse a sus beneficios. Este cambio reconoce la realidad de la corresponsabilidad parental también en el ámbito económico.
Gastos compartidos
En el régimen de custodia compartida, los gastos se estructuran de manera diferente:
Gastos ordinarios: Cada progenitor asume los gastos durante su período de custodia.
Gastos extraordinarios: Se mantiene la obligación de contribuir proporcionalmente a gastos médicos, educativos y de actividades extraescolares.
Vivienda familiar: Se buscan soluciones que permitan mantener la estabilidad del menor, como la alternancia en el uso de la vivienda familiar.
Consejos prácticos para progenitores
Preparación para la custodia compartida
Adecuación del hogar: Preparar un espacio adecuado para el menor en ambos domicilios.
Coordinación de rutinas: Establecer rutinas similares en ambos hogares para facilitar la adaptación.
Comunicación con el menor: Mantener comunicación abierta sobre la nueva situación familiar.
Flexibilidad: Estar dispuesto a adaptar el régimen según las necesidades del menor.
Herramientas de comunicación
Aplicaciones móviles: Utilizar aplicaciones específicas para coordinar horarios y comunicaciones.
Agenda compartida: Mantener una agenda común con actividades, citas médicas y eventos escolares.
Comunicación respetuosa: Separar los conflictos de pareja de las decisiones sobre los hijos.
Mediación: Acudir a mediación familiar cuando surjan desacuerdos.
La custodia compartida representa una oportunidad única para que los menores mantengan vínculos sólidos con ambos progenitores. Si estás considerando esta opción, es fundamental contar con asesoramiento legal especializado que pueda guiarte en el proceso y ayudarte a encontrar la solución más adecuada para tu familia.
Contacta conmigo y te informaré sin compromiso.
La evolución hacia la custodia compartida como régimen preferente marca un cambio paradigmático en el derecho de familia español. La custodia compartida ha pasado de ser una excepción a convertirse en una opción preferida, reflejando una comprensión más profunda de las necesidades de los menores y los beneficios de mantener vínculos sólidos con ambos progenitores.
Los cambios jurisprudenciales recientes, especialmente la doctrina establecida por el Tribunal Supremo, han consolidado este nuevo enfoque. Sin embargo, la implementación efectiva de la custodia compartida requiere no solo cambios normativos, sino también una transformación cultural que reconozca la importancia de la corresponsabilidad parental.
Para que la custodia compartida sea verdaderamente efectiva, es fundamental que:
- Los progenitores comprendan que se trata de un régimen que beneficia principalmente a los menores
- Los profesionales del derecho se adapten a este nuevo paradigma
- Las instituciones proporcionen los recursos necesarios para su implementación
- La sociedad reconozca y apoye este modelo de familia
El futuro del derecho de familia apunta hacia un modelo más equilibrado y corresponsable, donde la custodia compartida no es solo una opción legal, sino una oportunidad para que los menores mantengan vínculos sólidos con ambos progenitores, incluso después de la separación o divorcio de sus padres.